Un proxy, o servidor proxy, en una red informática, es un servidor —programa o dispositivo—, que hace de intermediario en las peticiones de recursos que realiza un cliente (A) a otro servidor (C). Esta situación estratégica de punto intermedio (B) le permite ofrecer diversas funcionalidades: control de acceso, registro del tráfico, restricción a determinados tipos de tráfico, mejora de rendimiento, anonimato de la comunicación, caché web, etc.

La palabra inglesa proxy significa procurador en español.

  • Comúnmente un servidor proxy, es un equipo informático que intercepta conexiones de red hechas desde un cliente a un servidor de destino.

    • El más popular es el servidor proxy de web. Interviene en la navegación por la web, con distintos fines: seguridad, rendimiento, anonimato, etc.
    • Existen proxys específicos para otros protocolos, como el proxy de FTP.

    • El proxy ARP puede hacer de enrutador en una red, ya que hace de intermediario entre ordenadores.

  • Proxy (patrón de diseño) también es un patrón de diseño (programación) con el mismo esquema que el proxy de red.

  • Un componente hardware también puede actuar como intermediario para otros.

Como se ve, proxy tiene un significado muy general, aunque siempre es sinónimo de intermediario. Cuando un equipo de la red desea acceder a una información o recurso, es realmente el proxy quien realiza la comunicación y a continuación traslada el resultado al equipo que la solicitó.

Hay dos tipos de proxys atendiendo a quién es el que quiere implementar la política del proxy:

  • proxy local: En este caso el que quiere implementar la política es el mismo que hace la petición. Por eso se le llama local. Suelen estar en la misma máquina que el cliente que hace las peticiones. Son muy usados para que el cliente pueda controlar el tráfico y pueda establecer reglas de filtrado que por ejemplo pueden asegurar que no se revela información privada (Proxys de filtrado para mejora de la privacidad).
  • proxy de red o proxy externo: El que quiere implementar la política del proxy es una entidad externa. Por eso se le llama externo. Se suelen usar para implementar cacheos, bloquear contenidos, control del tráfico, compartir IP, etc.

Dependiendo del contexto, la intermediación que realiza el proxy puede ser considerada por los usuarios, administradores o proveedores como legítima o delictiva y su uso es frecuentemente discutido.

FUENTE: Wikipedia