El caso del setter:
void SetA(A& value){ a = value; }
Si el objeto lo pasases por valor el programa tendría que hacer una copia temporal del mismo mientras que al pasarlo como referencia te ahorras dicha copia.
Dado que una referencia es similar a un puntero (ambos permiten modificar la variable original) suele ser costumbre que el setter reciba el argumento como referencia constante... Así garantizamos que el objeto no va a ser modificado dentro de la función:
void SetA(A const& value){ a = value; }
El caso del getter:
A& GetA(){ return a; }
Este caso es más delicado. Al devolver una referencia estás exponiendo la variable propia del objeto, lo que puede ser peligroso:
B b;
A& a = b.GetA();
a.some_int = -1; // es -1 un valor valido??
Lo que se suele hacer es devolver una copia del objeto para prevenir precisamente este tipo de problemas.
Una alternativa que se puede apreciar, por ejemplo, en la STL es ofrecer dos versiones del getter: la habitual que devuelve una copia y una segunda pensada para cuando el objeto es constante que devuelve una referencia constante. Como dicho así parece complicado lo vemos mejor con un ejemplo:
// Versión normal
A GetA(){ return a; }
// Versión para el objeto constante
const A& GetA() const { return a; }
La principal ventaja de esta solución estriba en que al utilizar el objeto en su formato constante podemos ofrecer una referencia puesto que tenemos la seguridad de que la variable miembro no se va a ver modificada:
const B b;
A& a = b.GetA(); // error, la referencia debe ser constante
const A& a = b.GetA();
a.some_int = -1; // error, la referencia es constante
Por supuesto si un getter nos devuelve una referencia podemos optar por hacer una copia si ello nos conviene:
const B b;
A a = b.GetA(); // hacemos una copia de A
a.some_int = -1; nuestra copia no es constante